jueves, 19 de enero de 2012

Las fiestas de cumpleaños de mi hijo

El pasado sábado celebramos el cumpleaños de mi hijo mayor con sus compañeros de clase. Es la tercera fiesta que celebramos. La primera fue en petit comité, simplemente con su hermano, su padre y yo. La segunda fue con la familia un poco más ampliada incluyendo tíos y primos; y la tercera fue la del pasado sábado, con sus compañeros de clase más sus padres y madres, ¡Dios, qué horror!


No soporto este tipo de fiestas multitudinarias. Lo único bueno es que se juntan los niños que cumplen años en el mismo mes y en el siguiente y lo celebran todos a la vez en una única fiesta, así nos ahorramos unos cuantos cumples. Menos mal, si no, tendríamos unos 24 cumpleaños durante el curso escolar...¡insoportable!


El caso es que te tienes que juntar con gente tan variada como desconocida y si encima eres una de las anfitrionas es lo peor de lo peor porque tienes que estar pendiente de que la gente se sienta a gusto. Un evento al que no te apetece nada ir y en el que encima tienes que disimular que te lo estás pasando genial y que estás super feliz porque es la fiesta de cumpleaños de tu hijo. A veces me pregunto si es que no seré una buena madre por no disfrutar de estos momentos.


En este tipo de fiestas el único tema de conversación son los hijos, el colegio, las tareas extraescolares, lo bien que se les da a todos el fútbol o el inglés, o que tal profesora es magnífica, o que tal madre pasa de todo, o que he apuntado a mi hijo a violín o a piano porque la música es muy buena para el desarrollo del pensamiento abstracto, en fin, una serie de chorradas para quedar bien, o simplemente para rellenar los silencios que se producen porque no nos conocemos demasiado. 


Y yo pienso... pobres niños, saturados de actividades extraescolares solamente para ocupar un espacio de tiempo durante el que los padres están trabajando, eso en el mejor de los casos, ya que hay padres que matriculan a sus hijos en un montón de actividades porque trasladan sobren sus niños su deseo de lo que les gustaría haber sido y no pudieron, sin darse cuenta que están educando monstruitos que en su futuro probablemente tendrán algún trauma, porque los niños de 6-7 años necesitan jugar. Necesitan relacionarse con otros niños, necesitan estar en contacto con gente, desarrollar sus habilidades sociales, de psicomotricidad, desarrollar sus gustos, sus aficiones, pero con tranquilidad, no hay prisa. Tienen que aprender cuáles son los verdaderos valores importantes de la vida para que en el futuro sean personas íntegras, completas y lo más importante, felices. Uno puede ser muy inteligente, tener muchos conocimientos, pero ser un inepto social y emocional y desde luego a mí eso no me compensa.


Trabajando en el colegio
Mi hijo, por ahora, no va a actividades extraescolares, pienso que con las horas que están en el colegio más la cantidad de deberes que les mandan (que esa es otra), por ahora es suficiente. Ya tendrá tiempo de especializarse en cosas que le gustan. Prefiero que el resto del tiempo juegue con sus amigos de nuestra urbanización, o con sus juguetes, o que lea, o que dibuje...es decir, que tenga tiempo libre y desarrolle de esta manera sus gustos. 
JUGAR
Por supuesto esta es mi manera de pensar y admito que estoy en contra del sistema educativo en España, totalmente anticuado y que lo único a lo que lleva es a la competitividad y al estrés desde que somos muy pequeños. Pero bueno, este es otro interesante debate que conllevaría otro post. Quizá algún día lo desarrolle mejor y más claramente.




...y mientras tanto a esperar a ver cuándo será la siguiente fiesta de cumpleaños del cole. Bueno, al menos esta vez no seré una de las anfitrionas,¡¡uuff!!


Hasta la próxima,
E.

jueves, 12 de enero de 2012

Relación de dependencia: El vampiro

El vampiro

Charles Baudelaire
Tú que, como una puñalada,
en mi pecho doliente entraste,
y cual rebaño de demonios
viniste loca, engalanada,




para de mi alma sometida
hacer tu lecho y tu dominio;
-infame a quien me encuentro atado
como el forzado a su cadena,




y el jugador tenaz al juego,
y como el borracho a la botella,
y a los gusanos la carroña,
-¡sí, maldita, maldita seas!




Yo supliqué a la espada rápida
para ganar mi libertad,
y dije al pérfido veneno
que ayudara a mi cobardía.




Mas, ¡ay!, la espada y el veneno
me desdeñaron y me han dicho:
"No eres digno de redimirte
de tu maldita esclavitud,


¡Imbécil!- ¡Si de su dominio
nuestros esfuerzos te librasen,
tus besos resucitarían
el cadáver de tu vampiro!"


Charles Baudelaire (Las flores del mal)


martes, 10 de enero de 2012

El Canto de la Lluvia

Mesopotamia
Hola amigos, hoy toca un poema. Uno de mis poemas y poetas favoritos en lengua árabe, de origen iraquí:

El Canto de la Lluvia
Tus ojos, dos bosques de palmeras al alba,
o dos solas colinas que la luna abandona.
Tus ojos, si sonríen, vivifican las viñas,
ponen luces en danza...como lunas de un río
que el remo turba suave a la hora del alba,
como si palpitaran en sus cuencas estrellas...


Naufragan en tinieblas de diáfana tristeza,
igual que el mar se ofrece cubierto por la tarde:
tibieza del invierno, tiritar del otoño,
muerte y nacimiento, tinieblas y luz.
Se despierta en mi alma la convulsión del llanto
y un éxtasis salvaje oprime el firmamento,
el éxtasis de un niño al que amedranta la luna.
Río Tigris-Eúfrates


Como si el arco iris se bebiese las nubes,
y gota a gota se fundiera en la lluvia...
Los niños retozaban bajo los emparrados
y en el silencio de pájaros, en las ramas, picoteaban
el canto de la lluvia...
Lluvia...
Lluvia...
Lluvia...
La tarde bostezaba. Las nubes sin descanso
vertían y vertían el peso de sus lágrimas,
como un niño que insomne delirara en la noche
en busca de su madre-cada mañana ausente
desde hace ya un año. Él pregunta incansable,
más le dicen: "mañana, mañana volverá..."
Ha de volver.
Aunque los camaradas susurran que está aquí,
que al pie de la colina duerme un sueño de tumbas,
que traga seca la tierra y bebe de la lluvia,
como un gris pescador que recoge sus redes
y maldice las aguas y el destino, extendiendo
su canto a la región donde duerme la luna.
Lluvia...
Lluvia...
¿Conoces la tristeza que transmite la lluvia,
como hasta desplomarse el canalón borbotea,
qué soledad padece por ella el solitario?
Eterna -como el hambre, la sangre derramada,
el amor y los niños, los muertos-, así es la lluvia.
Tus pupilas me acechan en la noche lluviosa
y por las aguas del Golfo enjugan los relámpagos
-con madreperlas y estrellas- las riberas de Iraq,
como si preludiasen la salida del sol.
Sobre ellas, de sangre, la noche extiende su manto.
Y desde el Golfo grito:"¡Oh, Golfo,
dador de mil corales, de muerte y madreperlas!"
Entonces vuelve el eco,
Río Eúfrates- Iraq
igual que los sollozos:
"¡Oh, Golfo,
de muerte y madreperlas..."


Entreoigo al Iraq que se arma de truenos
y atesora relámpagos por llanos y montañas,
hasta que el fin el pueblo dilacere su sello:
No dejaron los vientos rastro de Zamud(1)
a lo largo del valle.
Entreoigo palmeras que se beben la lluvia,
gemir a las aldeas, cómo los emigrantes
desafían con velas y remos las tormentas
que atruenan sobre el Golfo, mientras alzan su canto:
"Lluvia...
Lluvia...
Lluvia...
Mas hambre en el Iraq.
El tiempo de cosecha lo reviste de frutos
para hartazgo tan sólo de cuervos y langostas,
para inútil molienda de piedrecilla y grano,
rueda que gira en los campos...empujada por el hombre.
Lluvia...
Lluvia...
Lluvia...
Qué de lágrimas derramadas la noche del exilio.
Nos excusamos-temiendo las críticas- con la lluvia...
Lluvia...
Lluvia...
Lluvia...
Y desde nuestra infancia los cielos se oscurecen
al llegar el invierno,
y llueve a cántaros.
Cada año -los campos en flor- pasamos hambre.
No para por Iraq un sólo año sin hambre.
Lluvia...
Lluvia...
Lluvia...
Cada gota de lluvia
es rojo o amarillo en botón de una flor.
Cada lágrima de los hambrientos y desnudos,
cada gota caída de sangre del esclavo,
es como una sonrisa que espera otros labios,
o un pezón sonrosado en boca del nacido
en un joven mañana donador de la vida.
Lluvia...
Lluvia...
Golfo Arábigo
Lluvia...
Con la lluvia el Iraq se cubrirá de hierba..."


Y desde el Golfo grito:"¡Oh, Golfo...
dador de mil corales, de muerte y madreperlas!"
Entonces vuelve el eco,
igual que los sollozos:
"Oh, Golfo,
de muerte y madreperlas."
Constante, el Golfo extiende sus abundantes dones
sobre la arena: amargas espumas, madreperlas,
y el ajado esqueleto de un triste náufrago
emigrado que aún hoy se bebe la muerte
en las fauces del Golfo y sus profundidades.
Mientras, en el Iraq, mil sierpes se beben el néctar
de la flor que el Eúfrates rocía.
Más oigo el eco,
suena en el Golfo:
"Lluvia.
Lluvia..
Lluvia...
Cada gota de lluvia
es rojo o amarillo en botón de una flor.
Cada lágrima de los hambrientos y desnudos,
cada gota caída de sangre del esclavo,
es como una sonrisa que espera otros labios,
o un pezón sonrosado en boca del nacido
en un joven mañana, donador de la vida."


Y llueve a cántaros...


(1) Zamud: tribu preislámica devastada por la cólera de Dios (N. del T.)


Badr Shâker As-Sayyâb (poeta iraquí, 1926-1964)
Traducción: Luis Miguel Cañada